Previous Page  389 / 778 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 389 / 778 Next Page
Page Background

387

Apoyan el diagnóstico de PNA: Clínica, urocultivo positivo, compromiso sistémico, fiebre

y dolor en fosa renal.

Exámenes de apoyo: Hemograma con leucocitosis, desviación a izquierda, VHS sobre 50

mm y PCR alta.

El método de elección para confirmar la existencia de pielonefritis aguda es la cintigrafía

renal con Tc 99 y DMSA en los primeros 14 días de evolución del cuadro.

Estudio

El estudio de la ITU ha estado en constante revisión en los últimos años. La estrategia de

mayor utilidad para reducir la morbilidad y prevenir las cicatrices renales adquiridas es el

diagnóstico oportuno y el tratamiento precoz, especialmente en lactantes y niños pequeños en

que puede haber errores diagnósticos.

Debe efectuarse ultrasonografía (USG) renal y vesical en primer episodio de ITU febril, o

después del segundo episodio si es una ITU afebril.

Uretrocistografía sólo si la USG muestra hidronefrosis, cicatrices u otro hallazgo

sugerente de reflujo vesicoureteral severo, o si ha tenido más de un episodio de ITU.

En menores de tres años, efectuar DMSA 6 a 12 meses después de ITU febril para evaluar

presencia de cicatrices.

Tratamiento

Ha sido ampliamente demostrado que el tratamiento oral en ITU es tan eficiente como el

endovenoso (ev) en paciente sin sepsis y con buena tolerancia oral, y que lo más importante es el

inicio lo más precoz posible, ojalá dentro de las primeras 48 horas para minimizar el riesgo de daño.

Particularmente en menores de tres meses, en inmunodeficiencias confirmadas y

eventualmente en niños de hasta 1 año de edad con sintomatología sistémica o mala tolerancia

oral, el tratamiento debe ser iniciado por vía ev con una cefalosporina de tercera generación

como primera elección.

– En mayores de 1 año de edad, la terapia deberá iniciarse

con un aminoglucósido en dosis

única (amikacina) cada 24 h, siendo candidatos a este regimen antimicrobiano todos los

pacientes con función renal normal, sólo exceptuando a paciente monorreno. Esta terapia se

mantendrá hasta confirmar con urocultivo (máximo 72 h) y entonces se deberá ajustar

tratamiento con antimicrobiano vía oral según susceptibilidad del antibiograma. Evaluar

obligatoriamente función renal con nitrógeno ureico (NU) y creatinina plasmática previo al

inicio del tratamiento.

Duración total de tratamiento: 7 a 10 días.

– En pacientes con diagnóstico de nefronia, la terapia de haber iniciado amikacina, se cambiará

por cefalosporina de 3º generación ev por 7 a 10 días según evolución clínica y ecográfica,

para luego completar 3 semanas con antimicrobiano oral de acuerdo a susceptibilidad al

antimicrobiano.

– En recién nacidos y diagnóstico de ITU con hemocultivos negativos el tratamiento debe

permanecer ev por 5 días, completando 10 con antimicrobiano vía oral según antibiograma.

En ITU afebril, se indica manejo con cefalosporinas idealmente 1ª generación por 7 días, a

los niños hasta 4 meses. En niños mayores puede realizarse manejo con nitrofurantoína,

cotrimoxazol o cefalosporina de 1º generación, también por 7 días.

Profilaxis

– Lactantes menores de 2 años con ITU febril, hasta completar estudio de imágenes.

– Pacientes con reflujo vesicoureteral (RVU) grado IV o mayor, ya que pacientes con grados

menores de reflujo tienen baja posibilidad de presentar nueva ITU febril.

Nefrología