GastroenterologÃa
Consumo de té y café protege contra la fibrosis hepática
El estudio muestra que los que beben café con frecuencia tienen un riesgo significativamente más bajo de rigidez en el hÃgado independientemente de su estilo de vida y ambiente.
El café y el té se han propuesto como contribuyentes importantes para limitar la progresión de la fibrosis hepática en la enfermedad hepática establecida. Sin embargo, se desconoce si esto es también válido para la fibrosis subclÃnica.
Louise Alferink y especialistas del Centro Médico de la Universidad de Erasmus MC, (Róterdam) evaluaron si la ingesta de café y té se asocian con la rigidez hepática en la población general. Se incluyeron participantes que se sometieron a elastografÃa transitoria, ultrasonido y completaron un cuestionario de frecuencia de alimentos. El consumo de café y té se clasificó en diferentes categorÃas de ingesta de tasas diarias: ninguna, moderada (> 0-3), o frecuente (⩾3). La fibrosis significativa se definió como mediciones de la rigidez del hÃgado (LSM, por siglas en inglés) ⩾ 8.0kPa. Se realizaron análisis de regresión que relacionaron el consumo con la fibrosis, la esteatosis y las LSM transformadas logarÃtmicamente, efectuando ajustes por calorÃas, ingesta de azúcar y crema, edad, sexo, Ãndice de masa corporal, esteatosis / LSM, HOMA-IR, ALT, actividad fÃsica, entre otros parámetros.
Se incluyeron 2.424 participantes (edad 66,5 ± 7,4; 43% varones) de los cuales el 5,2% tenÃa LSM ⩾ 8.0kPa y 34,6% esteatosis. La proporción de LSM ⩾ 8.0kPa disminuyó con el mayor consumo de café (P tendencia = 0,006). Esta asociación inversa se confirmó en la regresión multivariante. Entre quienes tomaban té, solo el consumo a base de hierbas (36,3%) tenÃa LSM inferior (transformado logarÃtmicamente) después del ajuste. Finalmente, diferentes subtipos de té se relacionaron con esteatosis en el análisis univariable, pero no en el análisis multivariable.
En suma, en la población general, el consumo habitual de café y té de hierbas se relacionan inversamente con la rigidez del hÃgado, pero no con la esteatosis. Sin embargo, se necesitan análisis longitudinales, asà como estudios de validación para dilucidar los mecanismos subyacentes.