Table of Contents Table of Contents
Previous Page  62 / 74 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 62 / 74 Next Page
Page Background

60

2.7 Tuberculosis Génito-urinaria

Para la tuberculosis renal se recomienda un ré-

gimen de terapia por 6 meses, con ajuste de dosis

de acuerdo a la función renal. El cultivo de orina

positivo para

M. tuberculosis

es un componente

diagnóstico necesario. En el caso de cursar con

obstrucción ureteral, hidronefrosis o insuficiencia

renal progresiva, pueden estar indicados procedi-

mientos quirúrgicos.

2.8 Tuberculosis abdominal

Se recomienda un régimen de 6 meses de

terapia para pacientes con tuberculosis peri-

toneal o intestinal. La presentación clínica es

habitualmente inespecífica por lo que requiere

un alto índice de sospecha para un diagnóstico y

tratamiento precoz. La terapia adyuvante con cor-

ticoesteroides no está indicada de forma rutinaria;

los datos sobre sus beneficios son limitados.

2.9 Tuberculosis pulmonar con cultivos

negativos

Pregunta 9: ¿Podría realizarse un tratamiento

de menor duración en los pacientes no infecta-

dos VIH con tuberculosis paucibacilar, es decir,

con BK negativa y cultivo negativo?

Recomendación 9: Se recomienda un régimen de

tratamiento de 4 meses en pacientes adultos no

infectados por VIH con BK y cultivos negativos.

(Recomendación con evidencia de muy baja

certeza).

En caso de sospecha clínica o radiológica de

TBC pulmonar, pero con BK y cultivos negati-

vos, el diagnóstico no debe ser excluido, aunque

deben considerarse diagnósticos diferenciales.

Algunas causas de fracaso para aislar orga-

nismos incluyen: el uso reciente de antibióticos

con actividad bactericida contra

M. tuberculosis

(por ejemplo, fluoroquinolonas); poblaciones

bacilares bajas; muestras de esputo inadecuadas;

variaciones temporales en el número de bacilos

expulsados; crecimiento excesivo de otros mi-

croorganismos, y errores en el procesamiento de

las muestras.

En todo paciente con sospecha de TBC pul-

monar deben realizarse 2 BK. De no ser posible,

por falta de expectoración, esta puede inducir-

se mediante nebulización con solución salina

hipertónica para obtener muestras para BK y

cultivos. Otros métodos diagnósticos incluyen

la fibrobroncoscopía con lavado broncoalveolar

y biopsia.

En un paciente con sospecha clínica o radioló-

gica de TBC pulmonar, debería iniciarse terapia

anti TBC con un régimen de 4 fármacos, inclui-

dos H, R, Z y E pese a tener cultivos de esputo

iniciales negativos. Si se aísla

M. tuberculosis

en un cultivo de esputo o mediante una prueba

molecular rápida, se continúa la terapia hasta

completarla con un régimen estándar de 6 meses,

basándose en las pruebas de susceptibilidad a

fármacos. En el caso de pacientes con cultivos

de esputo negativos, pero con alta sospecha de

TBC pulmonar, debe iniciarse terapia estándar y

realizarse un seguimiento clínico y radiológico

seriado. Si después de 2 meses de terapia existe

mejoría clínica y/o radiológica y no se identifica

otra etiología, debe continuar el tratamiento.

Basado en revisiones de ensayos clínicos, se

recomienda una terapia de sólo 4 meses de dura-

ción en pacientes adultos con sospecha de TBC

pulmonar y cultivos de esputo negativos, con

una fase inicial intensiva de 4 fármacos durante 2

meses, seguida de una fase de continuación con H

y R por 2 meses más. Debe evaluarse la respuesta

clínica y/o radiológica al final de los 4 meses para

determinar si debiera continuarse la terapia hasta

completar 6 meses. Cuando existe duda sobre la

negatividad de los estudios microbiológicos, es

preferible completar un régimen estándar de 6

meses.

Conclusiones

El tratamiento actual de la TBC tiene dos ob-

jetivos principales:

Curar al paciente afectado y

minimizar la transmisión del M. tuberculosis en

la comunidad

. Es importante también prevenir la

aparición de resistencia bacteriana. Para ello el

inicio de la terapia debe ser lo más precoz posible

y bajo observación directa.

Uno de los principales aportes de esta guía es

brindar distintos esquemas de terapia de acuerdo

a la condición del paciente, proporcionando reco-

mendaciones sobre el esquema ideal de manejo,

iniciando una fase intensiva de 2 meses con 4

fármacos, pudiendo retirar el etambutol si se de-

muestra sensibilidad a H y R, siguiendo con una

fase de continuación por 4 meses (completando el

número de dosis propuestas). Además, proporcio-

na distintas recomendaciones de tratamiento ante

condiciones especiales como TBC y co-infección

por VIH y TBC extrapulmonar, que son bastante

similares a las nuestras.

De acuerdo a las normas técnicas de trata-

miento anti TBC vigentes en Chile, actualmente

cumplimos con las principales recomendaciones

dictadas en esta guía. Consideramos como una

M. Lagos C. et al.

Rev Chil Enferm Respir 2017; 33: 54-61