Virología
La efectividad de la vacuna contra la varicela disminuye si es administrada antes de los 15 meses de vida
La vacuna atenuada de la varicela desarrollada por Takahashi en 1974 fue aprobada en los Estados Unidos en 1995, recomendándose para administración rutinaria a niños sanos de 12 a 18 meses de la edad, además de niños mayores que aún no la hayan tenido. Previamente, se había divulgado que la eficacia total de la vacuna en práctica clínica era relativamente buena (de un 85%), por lo menos durante los primeros años después de la vacunación, sin embargo, algunos informes sobre brotes de varicela en grupos con índices substancialmente bajos de inmunización (73% y 80%), han centrado la preocupación en las actuales guías o recomendaciones para la administración de la vacuna. Está claro que la incidencia de la varicela en Norteamérica está disminuyendo como resultado del extenso uso de la vacuna, sin embargo, las muertes por varicela y otras complicaciones asociadas en personas inmuno comprometidas, todavía ocurren y continuarán sucediendo hasta que se elimine la infección, por tanto, es importante supervisar de cerca la incidencia de la varicela y la eficacia de la vacuna en un cierto plazo, para así poder determinar si un aumento de dosis sería necesario para mejorar su efectividad.
El objetivo del estudio publicado por JAMA fue valorar si la eficacia de la vacuna contra la varicela se veía afecta, ya sea por el tiempo transcurrido desde que se realizó la vacunación o por la edad del sujeto vacunado. El estudio de tipo caso-control se realizó en el periodo de marzo de 1997 a junio de 2003 y los participantes seleccionados correspondieron a 339 niños mayores de 13 meses que se les diagnosticó clínicamente varicela y que además tuvieron un resultado positivo de la prueba de reacción en cadena de la polimerasa (PCR) para el ADN del virus de la varicela-zoster. Para cada sujeto, se seleccionaron dos controles sanos, similarmente emparejados por edad y características pediátricas.
Según los resultados de la investigación, aunque la eficacia de la vacuna fue estadísticamente ajustada, hubo una diferencia considerable entre el primer año después de la vacunación (97%) y el rango segundo a octavo año (84%). La eficacia de la vacuna en el primer año era substancialmente baja si ésta se había administrado en pacientes menores de 15 meses (73%) respecto a la administración en mayores de 15 meses (99%), aunque la diferencia en la eficacia general promedio para niños inmunizados menores de 15 meses no fue estadísticamente diferente o apreciable al ser comparados con los niños mayores de 15 meses (81% versus 88%).
Los médicos del Departamento de Pediatría de la Facultad de Medicina en la Universidad de Yale (New Haven, Estados Unidos) concluyeron que aunque la vacuna de la varicela es efectiva, su eficacia decrece considerablemente después de un año, más aún cuando su administración sucede a una edad menor de 15 meses.
Fuente bibliográfica
JAMA 2004; 291(7):851-5