Neurología
La dieta puede modular el riesgo de demencia
La obesidad, la diabetes mellitus tipo 2, enfermedades cardiovasculares e hipercolesterolemia son factores de riesgo establecidos para el envejecimiento patológico del cerebro que se han relacionado con la subyacente resistencia a la insulina. Estas condiciones han aumentado considerablemente en parte debido al aumento en el consumo calórico de grasas saturadas y carbohidratos simples. Este patrón puede aumentar el peligro de deterioro cognitivo relacionado con el envejecimiento y la enfermedad de Alzheimer, aunque la literatura biomédica reciente muestra variadas inconsistencias.
Docentes del Veterans Affairs Puget Sound Health Care System, en Seattle, Estados Unidos, a través de un ensayo controlado aleatorizado compararon una dieta rica en grasas saturadas e hidratos de carbono simples con una dieta baja en grasas saturadas e hidratos de carbono simples. Las intervenciones se denominaron HIGH y LOW, respectivamente. Se consideraron cuarenta y nueve adultos mayores (20 adultos sanos con una media [DE] de edad de 69,3 [7,4] años y 29 con aMCI con una media [DE] de edad de 67,6 [6,8] años). Los participantes recibieron la dieta HIGH (grasa, 45% [de grasa saturada, >25%], hidratos de carbono, 35%-40% [índice glucémico, >70] y proteínas, 15% -20%) o la dieta LOW (grasa, 25%; [grasas saturadas, <7%]; hidratos de carbono, 55%-60% [índice glucémico, <55] y proteínas, 15%-20%) durante 4 semanas. Al inicio y final de las dietas se realizaron pruebas cognitivas, una prueba de tolerancia oral a la glucosa y punción lumbar. Finalmente, se evaluaron las concentraciones en LCR de β-amiloide (AS42 y Aβ40), proteína tau, insulina, F2 isoprostanos, y apolipoproteína E, lípidos plasmáticos e insulina, y las medidas de cognición.
Para el grupo de aMCI, la dieta LOW aumentó las concentraciones de AS42 en el LCR, contrario a los patrones patológicos observados típicamente en la enfermedad de Alzheimer. La dieta LOW presentó un efecto contrario para los adultos sanos, es decir, disminución de AS42 en el LCR, mientras que el esquema HIGH aumentó AS42 en LCR. La concentración de apolipoproteína E se incrementó con la dieta LOW y disminuyó con la HIGH. Para el grupo de aMCI, la concentración de insulina en LCR aumentó con la dieta LOW, pero la dieta HIGH disminuyó el nivel de insulina en los adultos sanos. La dieta HIGH elevó los lípidos plasmáticos y la dieta LOW los disminuyó, presentando los mismos efectos para las concentraciones de F2 isoprostanos e insulina. El retraso en la memoria visual mejoró en ambos grupos después de la finalización de 4 semanas de dieta LOW.
En conclusión, estos resultados sugieren que la dieta puede ser un poderoso factor ambiental que modula el riesgo de la enfermedad de Alzheimer a través de sus efectos sobre el sistema nervioso central vía concentraciones de AS42, lipoproteínas, estrés oxidativo y la insulina.
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