Modulación de la microbiota intestinal como estrategia innovadora en diabetes tipo 2
Diversas intervenciones, desde probióticos y dietas personalizadas hasta farmacoterapias, demuestran su potencial para mejorar el control glucémico, reducir la resistencia a la insulina y los riesgos cardiometabólicos.
La diabetes mellitus tipo 2 (DMT2) es un trastorno metabólico prevalente, en el que la microbiota intestinal juega un rol crucial en su patogénesis, ligada a la resistencia a la insulina y sus complicaciones. Intervenciones que modulan la composición microbiana -probióticos, dietas, fármacos específicos- han mostrado efectos positivos en el control glucémico y la reducción del riesgo cardiometabólico.
El Dr. Mustafeez Ur Rehman, de la Manchester University National Health Service (NHS) Foundation Trust, Reino Unido, lideró esta revisión sistemática con el objetivo de analizar la evidencia clínica de intervenciones dirigidas a la microbiota en adultos con DMT2, evaluando sus resultados glucémicos y el impacto en las complicaciones.
Se incluyeron ensayos controlados aleatorizados y estudios de intervención dietética en adultos con DMT2 o riesgo metabólico, seleccionados hasta septiembre de 2024. Las intervenciones variaron desde probióticos y dietas personalizadas hasta farmacoterapias. Los estudios primarios eran de duración limitada (tres a seis meses) y con tamaños de muestra modestos (usualmente menos de 120 participantes).
Los diez ensayos revisados demostraron consistentemente que la modulación de la microbiota intestinal ofrece mejoras clínicas en la DMT2. Las intervenciones se asociaron con avances en el control glucémico, la sensibilidad a la insulina y la reducción de riesgos cardiometabólicos.
La suplementación con Akkermansia muciniphila pasteurizada incrementó la sensibilidad a la insulina en un 28,6% y redujo la insulinemia en un 34%. La combinación de berberina y Bifidobacterium breve resultó más efectiva que las terapias individuales para reducir el colesterol posprandial y el colesterol-LDL. Las dietas personalizadas guiadas por la microbiota lograron la remisión de la diabetes en el 61% de los pacientes recién diagnosticados, reduciendo significativamente la HbA1c y los triglicéridos.
Fármacos como la empagliflozina no solo mejoraron el control glucémico, sino que también modificaron la microbiota intestinal, enriqueciendo especies productoras de butirato y confiriendo beneficios cardiovasculares. El extracto de poroto blanco redujo la HbA1c en un 0,72% y mejoró la neuropatía diabética periférica. Asimismo, dietas específicas (enriquecidas con mariscos o sardinas) mejoraron la sensibilidad a la insulina y marcadores cardiometabólicos, como la adiponectina, lo que subraya el potencial de estas estrategias para el manejo integral de la DMT2.
En resumen, la modulación de la microbiota intestinal es una estrategia prometedora para mejorar la resistencia a la insulina y mitigar las complicaciones de la diabetes tipo 2. Las intervenciones dietéticas y farmacológicas inducen cambios microbianos favorables con beneficios metabólicos. Pese a las limitaciones, como la corta duración y el tamaño muestral reducido, la consistencia de los hallazgos subraya el potencial de estas terapias como complemento al tratamiento estándar, destacando el eje intestino-metabólico en la medicina de precisión para esta enfermedad crónica.
Fuente bibliográfica
Gut Microbiota-Directed Interventions in Type 2 Diabetes: A Systematic Review of Clinical Outcomes and Complication Risk
Ur Rehman M, et al.
Cureus 17(10): e95045