Impacto de la microbiota oral y de la piel en la hipertensión
Actuarían como moduladores de la presión arterial manteniendo el balance de sodio.
La presión arterial (PA) elevada o hipertensión, que afecta a más del 50% de la población mundial, es el principal factor de riesgo de las enfermedades cardiovasculares. Investigaciones recientes indican que la variación interindividual en la regulación de esta, no solo se atribuye a la genética y a factores ambientales, sino que también se debe a variaciones en la composición de la microbiota comensal.Dichos comensales se adquieren en todos los sitios expuestos del huésped, como la cavidad oral y la piel.
Para conocer la interacción entre estos dos factores, investigadores de la Universidad de Toledo examinaron la microbiota cutánea y oral en un modelo de rata hipertensa. Los roedores siguieron inicialmente una dieta baja en sal después del destete y luego se alimentaron con una dieta alta en esta durante cuatro semanas. El equipo recogió muestras encontrando en abundancia Actinobacteria, bacterias conocidas por reducir el nitrato y convertirlo en óxido nítrico en la cavidad oral.
El nitrato es un compuesto natural que puede ser perjudicial en niveles elevados. El óxido nítrico es un gas que ayuda a dilatar los vasos sanguíneos y reduce la presión
También observaron que tener una mayor abundancia de cianobacterias en la piel era beneficioso para que las ratas mantuvieran su hipertensión bajo control. Estas son tolerantes a la sal, lo que puede desempeñar un papel en la regulación de la presión arterial a través del mantenimiento del equilibrio del sodio.
En conclusión, este es el primer estudio que identifica una microbiota específica como contribuyente a la regulación de la PA. En particular, tanto las actinobacterias orales como las cianobacterias cutáneas fueron beneficiosas en esta modulación.
