Medicina Intensiva
Frutas y verduras: potentes protectores del accidente cerebrovascular
En este meta-análisis, se encontró que el consumo de hortalizas y frutas tiene un vínculo inverso con el riesgo de derrame cerebral, y este tipo de asociación también fue consistente cuando el análisis se realizó por subgrupos.
Durante las últimas 4 décadas, la tasa de accidentes cerebrovasculares ajustada por edad en los países de altos ingresos se redujo en un 42% (163 a 94 por cada 100.000 personas/año), mientras que la del ictus se duplicó (52 a 117 por cada 100 000 años-persona) en los países de ingresos bajos y medios. Las tasas de mortalidad por accidente cerebrovascular ajustada por edad y de discapacidad también fueron más altas en los países de bajos ingresos en comparación a los de ingresos medios o altos.
Dan Hu y colegas del Hospital Municipal de Qingdao, en China, realizaron un meta-análisis para resumir la evidencia a partir de estudios de cohorte prospectivos sobre la asociación de las frutas y verduras con el riesgo de accidente cerebrovascular. Los ensayos pertinentes se identificaron mediante una búsqueda en las bases de datos PubMed y Embase hasta enero de 2014. Los riesgos relativos de estudios específicos con intervalos de confianza del 95% se agruparon mediante un modelo de efectos aleatorios, y la relación dosis-respuesta se evaluó por splines cúbicos restringidos.
Finalmente, se incluyeron veinte estudios de cohorte prospectivos, con la participación de 16.981 accidentes cerebrovasculares entre 760.629 participantes. El riesgo multivariable relativo (intervalo de confianza del 95 %) de accidente cerebrovascular para la categoría más alta en comparación a la más baja de ingesta de frutas y verduras fue de 0,79 (0,75 a 0,84), y el efecto de 0,77 (0,71 - 0,84) para las frutas y 0.86 (0,79 - 0,93) para las verduras. La meta-regresión aplicada a grupos y subgrupos también mostró una asociación inversa con el riesgo de accidente cerebrovascular. Las frutas cítricas, manzanas/peras y verduras de hoja contribuyeron fuertemente a la protección. La relación dosis-respuesta lineal demostró que el peligro de accidente cerebrovascular se redujo en un 32% (0,68 [0,56 a 0,82]) y en un 11% (0,89 [0,81 - 0,98]) por cada 200 g/día más de frutas (P = 0,77) y de verduras (P = 0,62), respectivamente.
En conclusión, el consumo de frutas y verduras se asocia inversamente con el riesgo de accidente cerebrovascular.
