Salud Pública
Consumo moderado de alcohol protege contra algunas ECV
Sin embargo, beber en exceso predispone a sufrir muerte coronaria, insuficiencia cardÃaca, entre otras patologÃas vasculares.
Actualmente, se piensa que el consumo moderado de alcohol está asociado con un menor riesgo de desarrollo de enfermedades cardiovasculares (ECV) en comparación con la abstinencia o el exceso. Sin embargo, el papel del alcohol en la etiologÃa de las ECV es escasamente conocido. Los estudios disponibles suelen ser poco numerosos, pequeños en tamaño e incluyen diferentes tipos de no bebedores, sin excluir todas las formas de ECV preexistentes antes del inicio del análisis. Aunque los niveles más altos de consumo están asociados con un menor riesgo de presentación inicial de infarto de miocardio, esto es contrarrestado por la inclusión de bebedores frecuentes que tienen mayor riesgo de presentar inicialmente otras ECV asà como también mortalidad por causas no cardiovasculares.
Liderados por Steven Bell de la Universidad de Cambridge, los especialistas analizaron la asociación entre la ingesta de alcohol y las ECV a alta resolución, examinando la presentación inicial de 12 patologÃas cardiovasculares, cerebrovasculares, abdominales o vasculares periféricas en cinco categorÃas de consumo. Los participantes correspondieron a 1.937.360 adultos (51% mujeres), mayores de 30 años, libres de ECV al inicio del estudio. Las 12 manifestaciones sintomáticas comunes de ECV, incluyendo angina crónica estable, angina inestable, infarto agudo de miocardio, muerte coronaria no anunciada, insuficiencia cardiaca, muerte coronaria repentina / paro cardÃaco, ataque isquémico transitorio, accidente cerebrovascular isquémico, hemorragia intracerebral y subaracnoidea, enfermedad arterial periférica y aneurisma aórtico abdominal.
Un total de 114.859 individuos recibieron un diagnóstico cardiovascular incidente durante el seguimiento. En comparación con el consumo moderado, la ausencia de alcohol estuvo asociada con un mayor riesgo de angina inestable (R = 1,33, IC del 95%: 1,21 a 1,45), infarto de miocardio (1,32: 1,24 a 1,4), muerte coronaria no anunciada (1,56: 1,38 a 1,76), insuficiencia cardÃaca (1,24: 1,11 a 1,38) y aneurisma aórtico abdominal (1,32, 1,17 a 1,49). La ingesta de bebidas alcohólicas (excediendo las directrices) confirió un mayor peligro de presentar una muerte coronaria no anunciada, insuficiencia cardÃaca, paro cardiaco, ataque isquémico transitorio, accidente cerebrovascular isquémico, hemorragia intracerebral y enfermedad arterial periférica, pero menor riesgo de infarto de miocardio o angina estable.
En resumen, el estudio muestra que existen asociaciones heterogéneas entre el nivel de consumo y la presentación inicial de enfermedades cardiovasculares. Esto tiene implicancias para el asesoramiento de los pacientes, la comunicación en salud pública y la investigación clÃnica, lo que sugiere un enfoque más regulado para el papel del alcohol en la prevención las ECV.