Inmunología
ADNmt de linfocitos genera una respuesta antiviral
Estas células provenientes de donantes sanos y de pacientes con leucemia, liberan su ADN mitocondrial y potencian respuestas inmunológicas frente a una infección viral.
Los receptores celulares del sistema inmune innato como los anticuerpos en las células B, scavenger, y tipo Toll, están programados para reconocer, y responder a patrones moleculares asociados a patógenos (PAMP) presentes en microbios exógenos. Además, son capaces de identificar patrones moleculares asociados a peligro (DAMP), liberados por células dañadas. Recientemente, se demostró que las mitocondrias, que tienen un origen bacteriano ancestral, liberan su ADN mitocondrial (ADNmt), ATP y el factor de transcripción mitocondrial A (TFAM). El ADNmt liberado participa en la respuesta inflamatoria a través de diferentes vías y se considera una potente molécula inmunológica presente en la circulación de pacientes con ciertos tipos de cáncer, condiciones autoinmunes e infecciones como el VIH.
Björn Ingelsson y colegas de la Universidad de Linköping (Suecia) reportaron que los linfocitos humanos [células B y T, células asesinas naturales (NK)], así como también monocitos y neutrófilos derivados de donantes de sangre sanos, y células B de pacientes con leucemia linfocítica crónica, expulsan rápidamente el ADNmt en forma de estructuras filamentosas tras el reconocimiento de oligodeoxinucleótidos CpG y no CpG de clase C, que son moléculas cortas de ADN de hebra simple que contienen citosina seguida de guanina. Los motivos CpG se consideran PAMP debido a su abundancia en los genomas de patógenos, y a su escasa presencia rareza en los genomas de humanos.
Los resultados mostraron que la liberación fue neutralizada por ZnCl2, independiente de la muerte celular (apoptosis, necrosis, necroptosis o autofagia) y continuó en presencia de inhibidores de señalización de TLR9. Las redes de ADNmt de células B se diferenciaban de las trampas extracelulares de neutrófilos en cuanto a la estructura, la dependencia de las especies reactivas de oxígeno (ROS) y en que carecían de proteínas antibacterianas. Además, las redes de ADNmt actúan como mensajeros rápidos (dentro de minutos), iniciando la producción de antivirales como interferón tipo I.
En resumen, los hallazgos señalan un papel no reconocido anteriormente para los linfocitos en la defensa antimicrobiana, utilizando redes de ADN mitocondrial como señales en sinergia con las citoquinas y anticuerpos, lo que evidencia la interacción entre las mitocondrias y el sistema inmunológico.
