Neurología
Terapia agresiva con inmunosupresores es efectiva en la neurosarcoidosis
La neurosarcoidosis (NS) es un desorden neurológico relativamente raro para el cual no existen guías de tratamiento disponibles. El manejo con corticoides se ha descrito como el principal esquema para controlar la progresión de los síntomas. Sin embargo, recientemente algunos médicos han defendido la intervención temprana con medicaciones inmunosupresivas alternativas en pacientes que presentan sintomatología más grave. Además, existen muy pocos estudios sobre la condición, e incluso, sólo una minoría de ellos ha examinado seguimientos a largo plazo o la respuesta de los pacientes al tratamiento.
Thomas F. Scout y colaboradores (Universidad Drexel, Pittsburg, Estados Unidos), investigaron su propia experiencia durante la última década con respecto al uso de inmunosupresores alternativos, incluyendo corticosteroides y terapias alternativas, en 78 enfermos con NS. Los pacientes se catalogaron según las categorías diagnósticas para la esclerosis múltiple: definida, probable, posible.
Cuarenta y tres pacientes se agruparon como NS definida o probable y 5 como posible. Treinta se categorizaron con NS aislado y no fueron incluidos en el análisis de respuesta al tratamiento. Los pacientes tenían un promedio de visitas de 7.2 y habían sido observados un promedio de 44.1 meses. Veinte pacientes habían sido tratados con corticoides en pulsos y/o de mantenimiento solamente. Veintiséis se habían tratado con medicamentos inmunosupresores alternativos, con 23 de ellos bajo estas medicaciones a la hora del diagnóstico o en el plazo de 6 meses después del diagnóstico. De los pacientes tratados con las terapias inmunosupresivas alternativas, 18 (69%) mejoraron, 4 (el 15%) permanecieron estables, y 4 (15%) empeoraron (incluyendo una muerte). De los pacientes sólo con corticosteroides, 7 (35%) mejoraron, 11 (55%) seguían siendo estables, y 2 (el 10%) empeoraron. Dos pacientes no recibieron ningún tratamiento.
En conclusión, aproximadamente la mitad de todos los pacientes con neurosarcoidosis estaban con alto riesgo para la progresión de la enfermedad. Estas personas de riesgo elevado tratadas con corticosteroides más terapia inmunosupresiva alternativa, presentaron resultados muy favorables. Los efectos tóxicos relacionados con los tratamientos fueron mínimos.
