Salud pública
Teléfonos celulares cuadruplican los accidentes de tránsito
Las estadísticas indican que los conductores hablan a menudo a través de teléfonos celulares. Estudios observacionales del 2004 en los Estados Unidos han concluido que el 5% de ellos, sostenían en sus manos, a cualquier hora, un móvil. Los mismos tipos de estudios en otros países han reportado índices más bajos de uso. Internacionalmente, quienes conducen han reconocido que generalmente tienen a la mano este tipo de comunicación. Debido a las preocupaciones por los riesgos de potenciales accidentes, su utilización en las manos es ilegal en la mayoría de los países de la unión europea, en todos los estados australianos, en las provincias canadienses de Terranova y Labrador, y en Nueva York, Nuevo-Jersey y el distrito de Columbia en los Estados Unidos. La mayoría de las investigaciones sobre las implicaciones en la seguridad de los conductores han sido de diseño experimental, integrando pequeñas muestras de voluntarios. Estos estudios han encontrado que la telefonía móvil deteriora el funcionamiento en tareas de conducción, tales como tiempo de reacción, cambios de pistas y velocidad, distancias y conocimiento circunstancial. Las debilitaciones resultan de las distracciones cognoscitivas, pero también se ha señalado la distracción física. El riesgo estimado de un accidente con los teléfonos celulares es cuatro veces superior que cuando no son utilizados. Los teléfonos “manos libre” parecen no ofrecer ninguna ventaja de seguridad sobre los sostenidos en la mano.
Para explorar el efecto de dicho uso en los caminos, investigadores de la Universidad de Sydney (Australia), estudiaron a 456 conductores mayores de 17 años que habían poseído o utilizado telefonía móvil y habían estado implicados en accidentes de tráfico haciendo necesario la atención hospitalaria. Los resultados indicaron que la utilización de celulares hasta 10 minutos antes de un accidente estuvo asociado a una probabilidad 4 veces mayor de sufrir el impacto (riesgo de 4.1; 95% de IC, 2.2 a 7.7, P < 0.001). El riesgo fue independiente si se llevaba en la mano o no (manos libres: 3.8, 1.8 a 8.0, P < 0.001; en alguna mano: 4.9. 1.6 a 15.5, P = 0.003). El mayor peligro fue similar tanto en hombres como en mujeres o en conductores mayores.
En conclusión, cuando los conductores utilizan un teléfono celular existe una probabilidad creciente de un accidente dando como resultado variadas lesiones. Usar teléfonos con los denominados dispositivos “manos libres” no es más seguro.
Fuente bibliográfica
BMJ. 2005 Aug 20; 331(7514):428-32