Salud pública y nutrición
Consumo de bebidas azucaradas ocasionaría obesidad y diabetes tipo 2 en mujeres
La diabetes mellitus tipo 2 afecta a cerca de 17 millones de individuos en los Estados Unidos. El predominio ha aumentado rápidamente durante las últimas décadas en paralelo con la obesidad. Coincidiendo con estos aumentos, el consumo de bebidas con azúcar creció en un 61% en los adultos entre 1977 y 1997, duplicando los valores en niños y adolescentes. La reciente evidencia sugiere una asociación entre las bebidas suaves ricas en contenido de azúcar y el riesgo de obesidad en niños, pero datos en adultos son escasos. Además de contribuir a la obesidad, las bebidas azucaradas pueden aumentar el riesgo de diabetes porque contienen grandes cantidades de jarabe de maíz con alto grado de fructosa, que eleva la glucosa en la sangre de forma semejante a la sacarosa. Estas bebidas son la fuente principal de azúcares en la dieta y cada porción representa una cantidad considerable de carga glicémica que puede aumentar el peligro de sufrir diabetes. Además, las bebidas cola contienen colorante de caramelo, rico en glicación avanzada y en productos que pueden aumentar la resistencia a la insulina y la inflamación.
Sin embargo, ningún estudio ha examinado la asociación entre la ingesta de estas bebidas y el riesgo de diabetes tipo 2. Por lo tanto, investigadores de Departamento de Nutrición de la Universidad de Harvard (Boston, Estados Unidos) examinaron dicho riesgo en una cohorte de mujeres jóvenes y de mediana edad, entre 1991 y 1999. El análisis de la diabetes incluyó a 91249 mujeres libres de la enfermedad y de otras patologías crónicas importantes. La evaluación del cambio de peso incluyó a 51603 mujeres quienes completaron la información respecto a sus hábitos dietéticos y que posterioremente sus pesos corporales fueron controlados en 1991, 1995 y 1999.
Según los resultados, las personas con patrones estables de ingesta no presentaban ninguna diferencia respecto al aumento del peso, pero el peso ganado en un período de cuatro años fue más elevado entre mujeres que aumentaron el consumo de bebidas azucaradas a partir de 1 o más refrescos por semana a 1 o más por día (4.69 kilogramos entre 1991 a 1995 y 4.20 kilogramos entre 1995 a 1999) y era menor en mujeres que disminuyeron su ingesta (1.34 y 0.15 kilogramo para los 2 períodos, respectivamente). La consumición creciente de extractos de fruta edulcolorados también aumentó el peso comparado con el consumo disminuido. Las mujeres con 1 o más refrescos por día tuvieron un riesgo relativo de diabetes tipo 2 de 1.83 al compararlas con las que consumieron uno o menos por mes. Igualmente, el jugo de fruta estuvo asociado a mayor peligro de diabetes, con un riesgo de 2.
En conclusión, un mayor consumo de bebidas azucaradas se refleja en una mayor magnitud del aumento de peso y en un riesgo creciente para el desarrollo de diabetes tipo 2 en las mujeres, probablemente proporcionando por las excesivas calorías y grandes dosis de azúcares de rápida absorción.
Fuente bibliográfica
JAMA 2004 Aug 25; 292(8):927-34