Tabaquismo
La aparición temprana de problemas de comportamiento aumentaría el riesgo de fumar durante la adolescencia
La bibliografía médica ya ha evidenciado una asociación potencialmente causal entre los problemas de comportamiento y la ocurrencia de fumar tabaco, basada principalmente en la información de encuestas realizadas en escuelas centroamericanas. Si bien el fumar no es una causa sabida de problemas de conducta, estos resultados apoyan la hipótesis de que el hábito de fumar tabaco en jóvenes podría depender de los niveles de problemas de comportamiento, medido en términos de conducta que son dañinos durante desarrollo. Estas actitudes incluyen luchar, lenguajes incorrectos y actividades aventuradas o peligrosas. En otras investigaciones, los problemas de conducta y de agresión se han ligado a un exceso de ocurrencia en el uso de drogas, incluyendo el nivel de implicación al tabaco, y de variables exógenas tales como alteraciones del humor y problemas de atención. Entonces, según lo observado, habría razón para preguntarse si estas asociaciones que ligan el hábito de fumar a problemas de salud mental y/o de comportamiento, serían encontradas en países donde es más común el fumar y en donde suele existir una estigmatización social menor.
Para extender esta línea de investigación, docentes de las universidades de Chile y Johns Hopkins (Baltimore, Maryland,USA), eligieron centrarse en un solo país latino grande, Chile, para lo cual, examinaron la asociación entre los problemas del comportamiento y el consumo de tabaco en estudiantes adolescentes chilenos. Los datos fueron obtenidos de un estudio que incluyó mediante encuestas a 46.907 estudiantes adolescentes de las 13 regiones administrativas del país. Las evaluaciones se basaron en una versión española del “Drug Use Screening Inventory”, aplicando un modelo logístico de regresión para el análisis. Los estudiantes fueron emparejados por escuelas individuales y se hicieron ajustes estadísticos en función del sexo, edad y algunos factores de riesgo.
Los resultados del estudio señalaron que la prevalencia del tabaquismo en los adolescentes chilenos fue muy elevada, con cifras que oscilaron de un 56% al 65% en cada una de sus 13 regiones. Las posibilidades estimadas de tabaquismo en aquellos jóvenes con problemas conductuales más graves representaron cerca del doble de las observadas entre los que tenían problemas conductuales más leves, tanto antes como después de hacer ajustes en función del sexo, edad, falta de participación en actividades de recreo, grado de irritabilidad y magnitud de los problemas escolares, familiares y de salud mental.
Estos resultados ayudan a completar y complementar los datos aportados por estudios anteriores sobre tabaquismo en adolescentes con problemas de conducta, incluidos algunos recientes estudios centrados en la juventud centroamericana. Si bien la magnitud de las asociaciones observadas en Chile fue menor que la de las asociaciones encontradas en Centroamérica, la fuerza de esta relación como su significación estadística, se constataron en todo país. Este estudio es el primero realizado en Chile con el fin de explorar la posible existencia de relaciones causales como las descritas en esta publicación.
Fuente bibliográfica
Pan Am J Public Health 2003; 14(2): 84-90