Neuropsiquiatría
Síndrome de fatiga crónica: una revisión
La fatiga es un síntoma común en la comunidad. En general, la mitad de la población divulga algún grado de cansancio en los exámenes médicos y es señalada por lo menos, en el 20% de los pacientes que buscan asistencia médica. La fatiga es típicamente transitoria, de limitación personal y explicada por circunstancias que prevalecen, sin embargo, una minoría de esas personas experimenta una fatiga persistente y debilitante. Cuando la debilidad no es explicada por una condición médica tal, como anemia o hipotiroidismo, puede representar lo que se denomina síndrome de fatiga crónica. El síndrome de fatiga crónica es una enfermedad caracterizada por el cansancio o agotamiento de una persona que lo inhabilita, al menos, durante unos 6 meses, acompañada por varios otros síntomas, generalmente de tipo reumatológico, infeccioso y neurosiquiátrico.
Diversos mecanismos etiológicos se han investigado: infecciosos, inmunológicos, neuroendocrinos, trastornos del sueño y psiquiátricos, sin embargo, una causa “unificada” para el síndrome, aún tiene que ser dilucidada, ya que los resultados hasta la fecha sugieren que factores fisiológicos y psicológicos trabajan juntos para predisponer a un individuo y perpetuar su enfermedad. Es una patología heterogénea, con diversos disturbios patofisiológicos que manifiestan síntomas similares. Sin importar la patogénesis, las personas que padecen el síndrome crónico, similares a otras enfermedades crónicas, tienen un estado funcional substancialmente deteriorado, que da lugar a una morbilidad personal y económica, altamente significativa.
Niloofar Afari y Dedra Buchwald, médicos investigadores del Departamento de Psiquiatría de la Universidad de Washington (Seattle, USA), se plantearon realizar una amplia revisión del tema, la cual pudiese resumir el estado actual del conocimiento para el síndrome de fatiga crónica. Para ello, analizaron metodológicamente una serie de artículos y publicaciones, que abarcaban áreas del diagnóstico, prevalencia, patogénesis, evaluación, tratamiento y pronóstico.
Los resultados de Afari y Buchwald, sintetizaron varios aspectos, como por ejemplo, que este síndrome crónico se diagnostica en base a síntomas en donde los pacientes que la padecen experimentan una debilitación funcional significativa. Las anormalidades patofisiológicas existen a través de muchos dominios, sugieren que la fatiga crónica es una condición heterogénea, de etiología compleja y multifactorial. La evidencia, que recién comienza a emerger, apunta a aspectos genéticos y familiares, aunque el síndrome de la fatiga crónica tiene significativamente un traslape y comorbilidad con algunas alteraciones psiquiátricas, varias líneas de investigación sugieren que pudiese apartarse de estos desórdenes. Las percepciones del paciente, las atribuciones y sus habilidades para hacer frente a las dificultades pueden ayudar, sin embargo, a perpetuar la enfermedad. El tratamiento para el síndrome de la fatiga crónica se basa en estrategias farmacológicas y conductuales, siendo éstas bastante eficaces en asistir el cansancio, sus síntomas y la invalidez asociada.
Los autores terminan concluyendo, que es muy poco probable que el síndrome de fatiga crónica sea causado o sea mantenido por un solo agente. Los resultados hasta la fecha sugieren que los factores fisiológicos y psicológicos trabajan juntos para predisponer, precipitar y perpetuar a un individuo a la enfermedad. Por tanto, la evaluación y el trato deben ser multidimensionales y ajustados a las necesidades individuales de cada paciente.
Fuente bibliográfica
Am J Psychiatric 2003; 160(2): 221-236