Menopausia y farmacoterapia
Terapia de reemplazo hormonal aumenta el riesgo de enfermedad coronaria
El entendimiento del efecto de la terapia de reemplazo hormonal (TRH) sobre el riesgo de enfermedad coronaria ha sufrido un vuelco impresionante en estos últimos dos años. Si bien previos estudios observacionales habían sugerido que la TRH en mujeres postmenopáusicas disminuía entre un 40 y un 50% el riesgo de enfermedad coronaria, recientes investigaciones clínicas aleatorizadas no sólo han provisto evidencia sobre la no protección coronaria de dicha terapia, sino que más aún, han sugerido la posibilidad de que el uso de TRH produzca daño en mujeres postmenopáusicas.
Los hallazgos primarios del estudio WHI, específicamente la rama del trabajo que probaba el uso de estrógenos más progestina, sugirieron que el riesgo de enfermedad coronaria aumentaba al tratar a las pacientes asignadas al azar con TRH, si se las comparaba con el grupo placebo. Incluso el estudio fue detenido a los 5,2 años de seguimiento (estaba planeado para 8,5 años) porque se encontró que los riesgos de salud asociados con la TRH excedían a los potenciales beneficios.
El estudio fue llevado a cabo en diversos centro clínicos donde se reclutó a más de 16.000 mujeres con útero intacto, las cuales en el momento del screening tenían entre 50 y 79 años. Se les aleatorizó a tomar un comprimido diario de 0,625 mg de estrógenos equinos conjugados y 2,5 mg de medroxiprogesterona acetato.
En un principio se había propuesto que los hallazgos divergentes podrían atribuirse a diferencias en las características clínicas de las poblaciones estudiadas, incluyendo diferencias en la edad, años desde la menopausia y riesgo coronario subyacente.
No obstante, en el estudio final publicado recientemente en el New England Journal of Medicine, se entregan los resultados de la relación entre el tratamiento y el aumento de riesgo coronario considerando distintos “end points”, siempre contemplados como los más importantes “outcomes” primarios la aparición de infarto al miocardio no fatal o muerte debido a Enfermedad Coronaria.
El ensayo provee además un detallado análisis de subgrupos de mujeres definidos de acuerdo a sus características clínicas y niveles de biomarcadores, de modo de tratar de esclarecer de la mejor forma posible los resultados primarios.
Los autores advierten que el estudio puede presentar algunas limitaciones que hay que considerar. El WHI prueba un determinado esquema de tratamiento, por lo tanto los resultados no necesariamente se aplican a otras formulaciones, dosis o vías de administración de estas hormonas. Sin embargo, estudios aleatorizados que miden el uso de estrógenos solos han mostrado conclusiones similares con respecto a la enfermedad coronaria.
Otra limitación es la relativamente alta tasa de descontinuación de la terapia en el estudio, lo que incluso podría llevar a subestimar los efectos adversos coronarios del tratamiento.
Fuente bibliográfica
N Engl J Med 2003; 349(6):523-534