En el largo plazo
Enfermedades cardiovasculares se relacionan con maculopatías asociadas con la edad
El rol de las enfermedades cardiovasculares en el desarrollo de maculopatías asociadas con la edad, aún no ha sido del todo aclarado. Aumentos de la presión sanguínea y ateroesclerosis, por virtud de sus efectos sobre la circulación coroidal y depósito de lípidos en la membrana de Bruch, han sido propuestos como responsables de un mayor riesgo en el desarrollo de este tipo de lesiones en la retina.
En base a ello, investigadores del University of Wisconsin Medical School, Estados Unidos, realizaron un interesante trabajo con el fin de evaluar el verdadero papel de los trastornos cardiovasculares en la génesis de esta patología.
Según informa la revista Ophthalmology en su edición de abril de 2003, se trató de un estudio de cohorte realizado entre los años 1988 y 1990, en el que se incluyeron 3.684 pacientes entre 43 y 86 años, que vivían en Beaver Dam, Wisconsin, con un seguimiento a 5 años, y 2.764 personas con seguimiento a 10 años.
Los pacientes fueron sometidos a examen físico, estudio sanguíneo, cuestionario de evaluación y fotografía estereoscópica color de fondo de ojo.
Después de estandarizar parámetros como edad, género, antecedentes de alcoholismo, tabaquismo y consumo de vitaminas, fue posible verificar que los resultados corroboraban la existencia de una relación entre presiones de pulso y sistólica elevadas y aumento de la incidencia a 10 años de degeneración macular exudativa. Por el contrario, niveles elevados de lípidos en suero, infarto cerebral o de miocardio, no presentaron relación.
Según los autores, se abren perspectivas para establecer en estudios posteriores si la intervención sobre el ejercicio, una dieta baja en sodio o el uso de fármacos como diuréticos o inhibidores ECA, que afectan el colágeno y elastina vascular, puedrían tener efectos beneficiosos y reducir la incidencia de degeneración macular exudativa. De igual modo queda abierta la pregunta respecto de los posibles beneficios de un control de la presión arterial y su impacto sobre maculopatía relacionada con la edad.
Fuente bibliográfica
Ophthalmology 2003;110:636-643