Neurología
Marihuana medicinal y su impacto sobre la función ejecutiva
El tratamiento otorga mejoras en ciertos aspectos del desempeño cognitivo y en medidas del estado clínico y de salud general, aunque se requieren estudios más amplios para confirmar estos beneficios.
Actualmente, en determinadas localidades de Estados Unidos, se han promulgado programas completos para el uso de marihuana medicinal (MMJ), mientras que en algunos estados solo se permite un acceso limitado a estos productos. A la fecha, pocos estudios han investigado el impacto potencial de la MMJ sobre el rendimiento cognitivo, a pesar de una asociación bien documentada entre el consumo recreativo y la disfunción ejecutiva.
Staci Gruber y especialistas de la Escuela Médica de Harvard evaluaron el impacto del tratamiento por 3 meses con MMJ sobre la función ejecutiva, determinando si estos pacientes experimentan una mejora en el funcionamiento cognitivo, posiblemente relacionado con el alivio de los síntomas primarios. Como parte de un estudio longitudinal más amplio, 24 personas certificadas para el uso de MMJ completaron evaluaciones de función ejecutiva de base.
Los resultados sugirieron que, en general, los pacientes experimentaron cierta mejora en las medidas de funcionamiento ejecutivo, incluyendo pruebas cognitivas que reflejan un incremento de velocidad en completar tareas sin una pérdida de precisión. En los cuestionarios de auto-reporte, también indicaron mejoras moderadas en el estado clínico, incluyendo reducción de trastornos del sueño, disminución de síntomas depresivos, impulsividad atenuada y cambios positivos en algunos aspectos de la calidad de vida. Además, los individuos informaron una notable disminución en el empleo de fármacos convencionales respecto al inicio del estudio, con una disminución de un 42% en el uso de opiáceos. Por último, aunque los autores sugirieron que sus hallazgos son preliminares, justifican investigaciones adicionales en diferentes etapas y con tamaños de muestra más amplios.
En suma, la presente investigación proporciona evidencia de que después de 3 meses de terapia, los pacientes no experimentan déficit de funcionamiento ejecutivo, que a menudo si es observado en usuarios regulares y recreativos. Sin embargo, dada la tendencia al aumento en el uso de cannabis medicinal, es imperativo determinar el impacto potencial y eficacia del tratamiento a largo plazo.
