Oncología
La metástasis se potencia con la ingesta de grasas saturadas
El estudio identifica una subpoblación celular iniciadora de la invasión, evento dependiente del receptor lipídico CD36, que a su vez puede ser el blanco para inhibir estos procesos patológicos.
Los mecanismos por los que algunas células anómalas se separan de una lesión primaria para colonizar sitios distantes, aún son desconocidos en gran parte. Los eventos prometastásicos que son comunes a la mayoría de los tumores sólidos podrían incluir la transición reversible epitelio mesénquima así como también interacciones con células estromales activadas por tumores. Algunos de estos últimos, además secretan exosomas que contienen proteínas, ARNm y micro ARN, los que establecen un nicho prometastásico. Sin embargo, no se ha determinado la identidad ni existencia de una subpoblación celular iniciadora de invasión dentro del tumor primario.
Salvador Aznar-Benitah y colegas del Instituto de Investigación Biomédica Barcelona (IRB Barcelona) caracterizaron una subpoblación de células CD44 en carcinomas orales humanos. Algunas de sus particularidades son que no sobreexpresan genes mesenquimales, son de ciclo lento, expresan altos niveles del receptor de ácidos grasos CD36 y genes de metabolismo lipídico, y son únicas en su capacidad para iniciar metástasis. Los resultados del estudio mostraron que el ácido palmítico o una dieta rica en grasas en modelos animales (ratones) aumentan específicamente el potencial metastásico de estas células de una manera dependiente de CD36. Adicionalmente, el uso de anticuerpos neutralizantes para bloquear CD36 provocó una inhibición casi completa de la metástasis en modelos inmunodeficientes o inmunocompetentes de ratones ortotópicos de cáncer oral humano, sin efectos secundarios. Clínicamente, la presencia de células CD36+ iniciadoras, se correlaciona con un mal pronóstico para numerosos tipos de carcinomas, por lo que la inhibición de CD36 y la disminución de la metástasis, al menos en tumores humanos derivados de melanoma y en cáncer de mama, constituye un avance considerable.
En suma, los resultados indican que las células iniciadoras de metástasis dependen en particular de los lípidos dietéticos para promover la invasión tumoral.
