La fragilidad y vulnerabilidad perjudican la salud
La combinación de estos factores, que abarca aspectos fisiológicos y sociales (soledad y aislamiento), aumenta la mortalidad y el deterioro físico y cognitivo en adultos.
A medida que las personas envejecen, tanto la fragilidad (reserva fisiológica reducida) como la vulnerabilidad social (escasez de conexiones sociales, apoyo o interacción adecuadas) se vuelven más comunes y se asocian con consecuencias adversas. Los análisis de las relaciones entre estos constructos pueden verse limitados por la amplia gama de medidas utilizadas para estudiarlos. Un estudio de la Escuela de Salud y Bienestar de la Universidad de Glasgow en Reino Unido, tuvo como objetivo explorar esta combinación yel riesgo de tener problemas de salud.
Se realizó una búsqueda sistemática en la que se sintetizó 130 estudios observacionales. La fragilidad, en todos los tipos de evaluación, se vinculó con una mayor soledad y aislamiento social, una percepción insuficiente de apoyo, y una participación grupal reducida. Cada uno de estos componentes de vulnerabilidad social también se relacionó con una progresión más rápida de la fragilidad y menores probabilidades de mejora. Las combinaciones se asociaron con una mayor mortalidad, una disminución de la función física y deterioro cognitivo.
Este análisis revela que, la fragilidad y vulnerabilidad social aumentan la mortalidad y el deterioro físico y cognitivo en la población.
