Cardiología
Inadecuado control de la PA provoca mayor recurrencia de hemorragia intracerebral
En este estudio de cohorte, los autores observaron que los sobrevivientes a este trastorno son más propensos al retorno del evento hemorrágico al carecer de una regulación apropiada de su presión arterial.
La hemorragia intracerebral (HIC) es la forma más severa y menos tratable del accidente cerebro vascular (ACV), siendo responsable de al menos el 50% de la mortalidad y morbilidad relacionada a esta enfermedad cerebrovascular. Los sobrevivientes a este padecimiento, están en riesgo de sufrirlo nueva y recurrentemente, generalmente de forma más severa. Por lo tanto, su prevención secundaria es vital. En ese sentido, la vigilancia de la presión arterial (PA) elevada es la piedra angular de este tipo de prevención para la afección recurrente no lobular, sin embargo existe poca investigación al respecto como para informar el grado óptimo de reducción de la PA. Por su parte, el rol del control de la PA en la HIC lobular, sigue siendo escasamente definido.
El objetivo de esta investigación (Jonathan Rosand y colaboradores del Hospital General de Massachusetts, Boston, Estados Unidos) fue evaluar la relación entre la PA y el riesgo de HIC recurrente. Para esto se llevó a cabo un análisis observacional en un centro de referencia de atención terciaria con 1.145 pacientes de un total de 2.197 con HIC desde julio de 1994 a diciembre de 2013. Los 1.145 afectados sobrevivieron al menos 90 días y fueron analizados hasta diciembre de 2013 (promedio del seguimiento de 36,8 meses [mínimo, 9,8 meses]). Las mediciones de PA se obtuvieron a los 3, 6, 9 y 12 meses y cada 6 meses, a partir de personal médico o mediante auto informes de pacientes. La exposición se caracterizó de 3 maneras: (1) medidas de presión sistólica y diastólica; (2) clasificación de adecuado o inadecuado control de la PA basado en recomendaciones y (3) estado de la hipertensión.
Los resultados mostraron 102 casos recurrentes entre 505 sobrevivientes de HIC lobular y 44 eventos entre 640 supervivientes de la misma patología no lobular. Durante el seguimiento, se logró un control de la PA en al menos 1 medida en 625 pacientes (54,6% del total [rango, 49,2% - 58,7%]) y consistentemente (en todos los tiempos de la medición) en 495 individuos (43,2% del total [rango, 34,5% - 51,0%]). La tasa de episodios para la condición lobular fue de 84 por cada 1.000 personas/año entre pacientes con regulación inadecuada de PA, comparado con las 49 por cada 1.000 personas/año entre individuos con un registro adecuado de su presión. Por otro lado, para HIC no lobular, los sucesos ocurridos fueron de 52 por cada 1.000 personas/año con inadecuado manejo de PA y de 27 por cada 1.000 personas/año, para aquellos con presión regulada. En análisis de modelamiento de control de PA como un parámetro tiempo-variable, el control inadecuado se relacionó con alto grado de recurrencia en la forma lobular (R=3,53 [IC del 95%: 1,65 – 7,54]) y en la no lobular (R=4,23 [1.02 - 17,52]). La presión sistólica durante el análisis se vinculó con un incremento de ambos tipos de HIC, ya sea lobular (R= 1,33 por cada 10 mm de Hg de aumento [1,02 – 1,76]) y no lobular (R=1,54 [1,03-2,30]). Finalmente la PA diastólica se relacionó con riesgo elevado de recurrencia de la patología no lobular (R=1,21 por cada 10 mm de Hg de aumento [1,01- 1,47]), pero no así con la condición de origen lobular.
En resumen, los autores concluyen que en sobrevivientes de HIC, las medidas de PA indican que un inadecuado control se relaciona con alto riesgo de recurrencia de este tipo de hemorragia, tanto lobular como no lobular. Además, esta investigación sugiere que se requieren de estudios clínicos randomizados para determinar los beneficios de una vigilancia estricta de la PA en sobrevivientes de esta enfermedad.
