Cardiología
La duración del sueño predice eventos cardiovasculares
La cantidad y calidad del sueño muestran cambios tendencias en la sociedad moderna, la cual requiere más horas de trabajo, más trabajo por turnos y la disponibilidad permanente de productos básicos, reduciendo la duración promedio de sueño con la presencia cada vez mayor de fatiga, cansancio y somnolencia diurna excesiva . La falta de sueño tiene efectos nocivos sobre una variedad de sistemas con cambios detectables en las vías metabólicas, endocrinas e inmunes. Demasiado o poco sueño están asociados con resultados adversos para la salud, incluido la mortalidad total, diabetes tipo 2, hipertensión y trastornos respiratorios, la obesidad tanto en niños como adultos, y en general una mala percepción de la salud. La relación entre la duración del sueño y los eventos vasculares se da en forma de U, lo que sugiere que diferentes mecanismos pueden operar en cualquiera de los extremos de la distribución de la duración del sueño.
Docentes de la Facultad de Medicina de la Universidad de Warwick, Inglaterra, evaluaron la relación entre la duración del sueño y la morbilidad y mortalidad por enfermedad cardíaca coronaria (ECC), apoplejía y enfermedad cardiovascular total (ECV). Se realizó una búsqueda sistemática de publicaciones registradas en MEDLINE (1966-2009), EMBASE (desde 1980), The Cochrane Library, y búsquedas manuales sin restricción de idioma. Se incluyeron estudios con seguimiento de más de 3 años, con datos sobre duración de sueño al inicio del estudio, y casos de enfermedad coronaria, accidente cerebrovascular o enfermedad cardiovascular. Los riesgos relativos (RR) y el intervalo de confianza (IC) del 95% se combinaron mediante un modelo de efectos aleatorios.
En total, se obtuvieron 15 ensayos (24 muestras de cohortes) que incluyeron a 474.684 participantes masculinos y femeninos (seguimiento de 6,9 a 25 años), y 16.067 eventos (4.169 de cardiopatía coronaria, 3478 de accidente cerebrovascular y 8420 para el total de las ECV). La duración del sueño se evaluó mediante cuestionarios y casos de incidentes a través de registros de certificación y eventos. La menor duración del sueño se asoció con un mayor riesgo de desarrollar o morir de enfermedad coronaria (RR 1.48, IC del 95% 1.22-1.80, p <0,0001) y de accidente cerebrovascular (1.15, 1.00-1.31, p = 0,047); no por ECV total (1,03, 0,93 a 1,15, P = 0,52) sin evidencia de sesgo de publicación (P = 0.95, P = 0,30 y P = 0,46, respectivamente). La mayor duración del sueño se relacionó con un mayor peligro de cardiopatía coronaria (1,38, 1,15-1,66, P = 0,0005), de accidente cerebrovascular (1.65, 1.45-1.87, p <0,0001), y enfermedad cardiovascular total (1,41, 1,19-1,68, P < 0,0001), sin evidencia de sesgo de publicación (P = 0.92, P = 0.96, y P = 0,79, respectivamente).
En conclusión, corta y larga duración del sueño son predictores o marcadores de resultados cardiovasculares.
