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Diagnóstico
- Repetir determinación, descartar pseudohipocalemia y evaluar con ECG.
- Revisar historia clínica que permita precisar o descartar causas extrarrenales.
- Descartar hipocalemia por redistribución.
- Hipocalemia más hipertensión debe hacer plantear presencia de hiperaldosteronismo.
- Medir excreción de K en orina de 24 horas: < 25 a 30 mEq/día orienta a disminución de inges-
ta, pérdidas gastrointestinales o uso de diuréticos. > 25 a 30 mEq/día orienta a pérdida renal
de K. Determinar magnesio, calcio, gases.
- Determinación de aldosterona y actividad de renina plasmática.
Tratamiento
El pilar del tratamiento en una hipocalemia verdadera, es la administración de KCl. Deben
corregirse en forma simultánea otras alteraciones metabólicas asociadas como hipomagnesemia
o hipocalcemia.
En general, la corrección de la calemia se puede lograr rápido, sin embargo, la administración
de KCl se debe mantener por 5 a 7 días para repletar la célula.
En pacientes que se alimentan y tienen buena tolerancia digestiva, se puede utilizar la vía oral,
aportando 2 mEq/kg/d de K además, de su requerimiento basal.
Si no es posible utilizar la vía oral, o si la hipocalemia es menor de 2,0 mEq/l, se debe utilizar
la vía intravenosa, cuidando que la concentración de K en la mezcla no sea superior a 50 mEq/l
cuando se está utilizando una vía periférica, dado que concentraciones mayores provocan escle-
rosis del vaso.
Si el aporte de K requerido supera la capacidad que permite la vía periférica y la situación
clínica lo justifica, se pueden utilizar concentraciones mayores (100-150 mEq/l de solución) por vía
femoral o subclavia, evitando los accesos con directo contacto cardíaco por el riesgo de arritmias.
La velocidad de infusión de K puede tener un máximo de 10 a 20 mEq/hora/1,73 m
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. Es necesario
monitoreo cardíaco permanente, con control de calemia c/4 a 6 horas. Superada la emergencia,
se continúa con K oral o utilizando ambas vías.
Hipercalemia
Es la concentración de K en plasma sobre 5,5 mEq/l. Para evaluar adecuadamente la severidad
de la hipercalemia debe efectuarse en forma concomitante un ECG. Clasificación:
- Leve: K de 5,5 a 6,5. Sin alteración ECG.
- Moderada: K de 6,5 a 7,5 y/o alteraciones ECG mínimas (onda T alta).
- Severa: K mayor de 7,5 y/o alteraciones ECG más severas.
Las manifestaciones clínicas de la hipercalemia comprometen corazón y músculo esqueléti-
co. La hiponatremia y la hipocalcemia potencian sus efectos adversos. La debilidad muscular no
aparece hasta que la calemia sube de 8 mEq/l, salvo en los pacientes con parálisis periódica que
pueden hacerse sintomáticos con cifras más bajas. Las alteraciones cardíacas progresivas son onda
T picuda, disminución QT, ensanchamiento QRS, desaparición onda P y fibrilación ventricular.
Etiología
Aumento del aporte.
Pseudohipercalemia (ECG normal. Toma de muestra con hemólisis, aumento marcado de
células sanguíneas).
Redistribución:
- Acidosis metabólica, déficit de insulina e hiperglicemia.
- Catabolismo tisular.
- Bloqueo beta2 adrenérgico.
- Ejercicio severo.
- Parálisis periódica en su forma hipercalémica.
- Uso de succinilcolina.