Vigilancia genómica como factor estratégico
La secuenciación genética y el análisis de sus resultados permite conocer la evolución de un virus y sus variantes, así como su dispersión geográfica y temporal.
Fortalecer la vigilancia genómica en América Latina y el Caribe fue el objetivo de la 26ª edición del Curso de evolución viral y epidemiología molecular realizado en Panamá bajo la coordinación del Instituto Conmemorativo Gorgas de Estudios de la Salud, Fundación Oswaldo Cruz y la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
El encuentro contó con sesiones teóricas y prácticas divididas en módulos que abordaron la generación de datos a partir de la secuenciación genómica y el análisis de los resultados, entre otros temas.
“Estudiar la evolución de los virus es clave para detectar mutaciones o variantes que puedan modificar la tasa de transmisión o la gravedad de un patógeno y afectar la utilidad de las pruebas diagnósticas, vacunas y tratamientos. Esto es algo que hemos experimentado con el SARS-CoV-2, por lo que debemos profundizar la vigilancia genómica para cualquier virus emergente o reemergente”, comentó el doctor Jairo Méndez, asesor de la OPS.
De acuerdo con los organizadores, la secuenciación genética y el análisis de sus resultados permite conocer la evolución de un virus y sus variantes, así como su dispersión geográfica y temporal. El análisis oportuno de los datos sirve para identificar señales o cambios que pueden impactar en el comportamiento del patógeno y en las herramientas y medidas de salud. “La información obtenida puede ser un mecanismo complementario para guiar la respuesta a una epidemia o pandemia”, detalló el doctor Méndez.
Según Alexander Martínez, director del Departamento de Investigación en Genómica y Proteómica del Instituto Gorgas de Panamá, “este tipo de análisis bioinformáticos no es algo que se hace comúnmente en los laboratorios de salud pública de la región porque requiere entrenamiento y capacitación. A partir de ahora, muchos de estos centros podrán desarrollar estudios en sus instalaciones, en forma oportuna y para diversos virus de interés como monkeypox y otros agentes que puedan aparecer”.
El curso entregó herramientas para vincular la situación epigenética, secuenciación genómica y la información de la epidemiología molecular para definiciones estratégicas a nivel de cada país. Participaron más de 120 profesionales, 50 expertos en bioinformática de instituciones científicas y por primera vez tomadores de decisión como ministros de gobierno.
