Inédita neurocirugía en Encarnación
En el Hospital Regional del Instituto de Previsión Social se realizó un procedimiento de fijación de masas laterales C1-C2. Paciente se recupera satisfactoriamente.
La cirugía de fijación transarticular C1-C2 consiste en introducir tornillos a través de las masas articulares de las dos primeras vértebras cervicales para inmovilizar la articulación. Esto condicionará una limitación de los movimientos del cuello, sobre todo en la rotación. En ocasiones se requiere extraer un fragmento del hueso iliaco, necesario para favorecer la fusión vertebral cervical.
Así lo explicaron los neurocirujanos Cyril Guilbert y Cristian Miltos, quienes junto a la anestesióloga Madelaine Pedrozo y las licenciadas Laura Brítez y Amanda Burgos, instrumentadora quirúrgica y auxiliar, respectivamente, llevaron a cabo la operación de alta complejidad.
“Por primera vez se realizó este tipo de cirugía en el Hospital Regional de Encarnación-IPS. Se trató de una persona con una fractura del odontoides, que por ser de tipo inestable ameritó una fijación vertebral C1-C2 por medio de cuatro tornillos a masas laterales”, detallaron los subespecialistas. Tras salir de pabellón, el paciente fue trasladado a la Unidad de Terapia Intensiva Adultos donde se recupera bajo monitoreo constante.
Según se informó, el procedimiento se efectúa para aliviar el dolor o mejorar déficits neurológicos por desplazamiento entre las vértebras. La inestabilidad atlanto-axial puede originarse por varias causas. “En este caso fue por un traumatismo cervical”.
Como consecuencia de esto, comentaron los doctores Guilbert y Miltos, “se produce un excesivo movimiento alrededor de la articulación entre la primera y segunda vértebra cervical que puede dar lugar a dolor localizado que se exacerba con la actividad del cuello o manifestaciones neurológicas de diversa índole que puede conllevar una disminución de fuerza en brazos y piernas”.
