Dictan simposio sobre insuficiencia cardíaca aguda y crónica
Contó con expositores nacionales e internacionales y participaron médicos, residentes y estudiantes. Fue organizado por la Segunda Cátedra de Clínica Médica del Hospital de Clínicas.
El doctor Miguel Quintana, past presidente de la Sociedad Paraguaya de Cardiología, presidente electo de la Sociedad de Paraguaya de Cuidados Intensivos Cardiovasculares y director del Instituto Cardiovascular del Sanatorio Migo, fue el primer disertante y abordó el síndrome cardiorenal.
El médico, quien lleva más de 20 años en el área de cuidados intensivos cardiovasculares, comentó que este síndrome es una entidad muy difícil de ser clasificada y que esta categorización ha recibido muchas críticas, sin embargo, ha sido un marco conceptual muy práctico y que hace referencia al daño renal generado desde el sistema cardiovascular, que es capaz de generar patología cardiovascular.
“En cuanto al síndrome cardiorenal en los diferentes registros, su prevalencia oscila entre el 25 y el 40% en pacientes hospitalizados por insuficiencia cardiaca aguda descompensada, es decir tiene una muy alta prevalencia. La enfermedad renal preexistente crónica de todas estas formas contribuye al 60%, y de ese 40 por ciento, 60 se debe a patología crónica”, sentenció.
Mencionó que la mortalidad cardiovascular esta incrementada y que la causa por la cual se pierden pacientes con insuficiencia renal no es por muerte arrítmica, sino por progresión de falla cardiaca que afecta fundamentalmente al pronóstico de la insuficiencia cardiaca, tanto a corto, como a mediano y largo plazo.
La segunda ponencia estuvo a cargo del doctor Daniel Piñeiro, argentino y past presidente de la Sociedad Interamericana de Cardiología, quien dijo que la insuficiencia cardiaca es una patología muy prevalente y que el paciente es importante individualmente, pero también es un problema de salud pública que se ha trasformado en una carga para todo el sistema de salud en el mundo, tanto las hospitalizaciones y tratamiento.
“La clave está siempre en la prevención, es decir, el problema de la insuficiencia cardiaca individual lo puede solucionar por ejemplo el trasplante cardiaco, pero eso no a nivel de la salud pública. Lo que la salud pública debe hacer es que haya menos pacientes que lleguen a necesitar tratamientos complejos”, finalizó.
La jornada se realizó en el salón auditorio del Hospital de Clínicas de San Lorenzo, situado en el 5to piso y contó con alta presencia de participantes.
