Sustituir mantequilla por aceites vegetales para prevenir muertes prematuras
Reemplazar 10 g/día de mantequilla por la misma cantidad de aceites vegetales, especialmente de oliva, soya y canola, podría reducir la mortalidad total y por cáncer en un 17%.
Se ha demostrado que sustituir las grasas saturadas por las insaturadas y eliminar las trans beneficia la salud cardiovascular. Estudios indican que el consumo de mantequilla, rica en grasas saturadas, tiene efectos pequeños o neutros sobre las enfermedades cardíacas, aunque sus implicaciones en la mortalidad son variadas. En contraste, los aceites vegetales, como el de oliva, canola y soya, favorecen perfiles lipídicos saludables y disminuyen la inflamación, además de vincularse con un menor riesgo de cáncer y diabetes tipo 2. Sin embargo, la relación entre el consumo de mantequilla, aceites vegetales y la mortalidad no es concluyente, debido a la diversidad en los resultados de investigaciones previas, lo que subraya la necesidad de evaluaciones dietéticas a largo plazo para aclarar estas correlaciones.
En este estudio prospectivo, llevado a cabo por investigadores de la Universidad de Harvard en EE. UU., se analizaron las relaciones entre el consumo de mantequilla y aceite vegetal, y el riesgo de mortalidad total, así como por causas específicas en adultos estadounidenses.
Se utilizaron datos de tres grandes cohortes que incluían a 221.054 mujeres y hombres, con una edad promedio de entre 36 y 56 años, todos sin antecedentes de cáncer, enfermedades cardiovasculares (ECV), diabetes ni enfermedades neurodegenerativas al inicio del estudio. Los principales hábitos alimenticios evaluados incluyeron la ingesta de mantequilla (tanto la utilizada en la mesa como en la cocina) y varios aceites vegetales (como cártamo, soya, maíz, canola y oliva). La dieta se evaluó cada cuatro años mediante cuestionarios de frecuencia alimentaria semicuantitativos validados. La mortalidad total se consideró el resultado principal, mientras que la mortalidad por cáncer y ECV se analizaron como resultados secundarios.
Durante un seguimiento de hasta 33 años, se registraron 50.932 muertes, de las cuales 12.241 correspondieron a cáncer y 11.240 a ECV. Después de ajustar por factores de confusión, se halló que un mayor consumo de mantequilla estaba asociado con un 15% más de riesgo de mortalidad total (HR: 1,15), mientras que una mayor ingesta de aceites vegetales se relacionó con un 16% menos de riesgo de muerte (HR: 0,84).
Además, se observó una conexión significativa entre el consumo de aceites de canola, soya y oliva y una menor mortalidad total, donde cada 5 g/día adicionales de estos aceites se asociaron con una reducción en el riesgo de muerte (HR: 0,85, 0,94 y 0,92, respectivamente). En particular, aumentar en 10 g/día la ingesta de aceites vegetales se vinculó con un 11% menos de mortalidad por cáncer (HR: 0,89) y un 6% menos por ECV (HR: 0,94). Por otro lado, un incremento en el consumo de mantequilla se relacionó con un mayor riesgo de muerte por cáncer (HR: 1,12). Reemplazar 10 g/día de mantequilla por la misma cantidad de aceites vegetales podría disminuir la mortalidad total y por cáncer en un 17% (HR: 0,83).
En resumen, un mayor consumo de mantequilla se asoció con un aumento en la mortalidad, mientras que una ingesta elevada de aceites vegetales se relacionó con un menor riesgo de muerte. Sustituir la mantequilla por aceites vegetales puede ofrecer importantes beneficios en la prevención de muertes prematuras.
Fuente bibliográfica
Butter and Plant-Based Oils Intake and Mortality
Zhang Y, et al.
DOI: 10.1001/jamainternmed.2025.0205
