La importancia de los antibióticos en la sinusitis aguda infantil
El metaanálisis sugiere que este tipo de medicamentos son eficaces para reducir los sÃntomas de niños menores de 18 años con la inflamación nasal clÃnicamente diagnosticada.
La sinusitis aguda es una de las principales causas de prescripción de antibióticos en los niños. No hay evidencia de revisiones sistemáticas recientes que hayan examinado la eficacia de estos medicamentos en comparación con un placebo.
El equipo de investigación liderado por el MD. Nader Shaikh del Hospital Infantil de Pittsburgh en EE. UU., determinó si los antibióticos son superiores al placebo en el tratamiento de la sinusitis aguda en una población pediátrica.
Se realizó un metaanálisis buscando información en las bases de datos de Medline y Embase. Se consideraron estudios aleatorizados controlados con placebo centrados en el tratamiento de la inflamación nasal. En todos los seleccionados, los sÃntomas estuvieron presentes durante un perÃodo inferior a las cuatro semanas y los sujetos tenÃan menos de 18 años. El análisis incluyó seis estudios con un total de 956 niños, a quienes se les habÃa suministrado: amoxicilina en dosis altas o bajas, clavulanato combinado o solo, o cefuroxima (250 mg por dÃa).
Se evidenció que el uso de antibióticos redujo la tasa de fracaso del tratamiento en un 41% (cociente de riesgo= 0,59; IC 95%: 0,49 a 0,72) en comparación con el placebo. Aquellos tratados con este tipo de fármacos tuvieron 1,6 veces más probabilidades de tener diarrea (cociente de riesgo= 1,62; IC 95%: 1,04–2,51).
En conclusión, en niños con sinusitis aguda diagnosticada clÃnicamente, los antibióticos reducen significativamente la tasa de fracaso de la terapia en comparación con el placebo. Sin embargo, dada la naturaleza de la afección, estos hallazgos también podrÃan respaldar una observación minuciosa sin tratamiento antibiótico inmediato.
Fuente bibliográfica
Antibiotics for Acute Sinusitis in Children: A Meta-Analysis
Conway SJ, Mueller GD, Shaikh N. Children’s Hospital of Pittsburgh
Pediatrics. 2024;153(5):e2023064244
