Control instrumental potencia la analgesia por placebo
Individuos sanos que pueden verificar el momento de administración de un tratamiento o si este se les entrega, mejora sustancialmente la magnitud y duración de los resultados clínicos del dolor.
La analgesia mediada por placebo es un fenómeno robusto que se observa fácilmente tanto en el ámbito experimental como en el clínico. Aunque los investigadores han comenzado a desentrañar sus mecanismos psicobiológicos, aún quedan preguntas importantes sobre cómo podemos capitalizar el efecto placebo para mejorar los resultados clínicos del dolor.
BiyaTang e investigadores de la Escuela de Psicología de la Universidad de Sídney (Australia) estudiaron si proporcionar a los individuos un control instrumental - es decir, el hacerles saber cuándo y si se les administra un tratamiento - es capaz de mejorar la analgesia por placebo. El tratamiento durante este estudio consistió en la activación de un dispositivo falso, descrito como estimulación nerviosa eléctrica transcutánea (TENS) a los participantes. Para mejorar la credibilidad, el dispositivo falso emitió una baja vibración táctil y un sonido de pitido cuando supuestamente se activaba.
Mediante el uso de un diseño establecido para el dolor electrocutáneo, 87 voluntarios sanos recibieron un acondicionamiento de placebo con control instrumental sobre la administración del tratamiento, un acondicionamiento pasivo estándar sin ningún control sobre la administración del tratamiento, o fueron asignados al grupo de control de historia natural sin acondicionamiento y posteriormente fueron evaluados a una intensidad de descarga equivalente con y sin aplicación de placebo.
Ambos grupos de placebo demostraron una analgesia inicial. Sin embargo, los que recibieron control instrumental demostraron una analgesia significativamente mayor y de mayor duración, así como una menor excitación autonómica anticipada versus quienes recibieron el acondicionamiento placebo pasivo estándar. Esto, según los autores, sugiere que proporcionar un control instrumental sobre la administración del tratamiento puede facilitar la analgesia por placebo al mejorar su magnitud y durabilidad.
En consecuencia, los autores consideran que proporcionar un control instrumental sobre la administración terapéutica puede ser un método económico y ético de utilizar el efecto placebo para mejorar los resultados clínicos del dolor.
