Baja masa muscular afecta período perioperatorio
La pérdida de tejido corporal se vincula con un pobre pronóstico de morbimortalidad en múltiples patologías, independientemente del peso.
La medida del peso e índice de masa corporal, (IMC), es considerado como un método práctico y sensible para el pronóstico de los riesgos en salud y la progresión de enfermedades. Sin embargo, estos parámetros no dan cuenta de la variabilidad en la composición corporal, incluso en individuos con el mismo tamaño. Las alteraciones de la masa muscular son buenos factores predictivos de morbimortalidad, particularmente en escenarios clínicos donde es la enfermedad que afecta al paciente conlleva a la pérdida de volumen tisular.
Esta revisión narrativa proporciona una visión general de la relevancia que tiene la baja masa muscular en los resultados de salud para los pacientes hospitalizados, ambulatorios y de cuidados clínicos a largo plazo.
La baja masa muscular se asocia con desenlaces negativos tales como más complicaciones quirúrgicas y postoperatorias, mayor duración de la estancia hospitalaria, menor funcionalidad física, peor calidad de vida y menor supervivencia. Como tal, es probable que los beneficios clínicos potenciales de prevenir y revertir esta afección afecten los resultados de los pacientes y el uso de recursos/costos de atención médica.
Por lo tanto, se hace necesario disponer de herramientas clínicamente viables para medir la composición corporal para la detección e intervención de rutina. Los estudios de investigación que se realicen en el futuro deben dilucidar la efectividad de las intervenciones multimodales para contrarrestar la baja masa muscular y lograr resultados óptimos para los pacientes en el continuo de la atención sanitaria.
