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Pronunciamiento de la Academia de Medicina

del Instituto de Chile sobre la situación

de virus ebola en Chile y el mundo

Statement of the Chilean Academy of Medicine on ebola virus situation

in Chile and the world

Rev Chil Enf Respir 2014; 30: 230-231

Documentos

La Academia de Medicina tiene como propó-

sito el “contribuir al progreso del conocimiento

médico en todos sus aspectos, aspirando a ser

la conciencia reflexiva de la medicina chilena”.

La Academia ha seguido, al igual que diferentes

actores médicos y no médicos de Chile y el mun-

do, la situación del virus Ebola constatando la

situación de “alarma pública” generada. En con-

secuencia, la Academia ha considerado oportuno

el contribuir con un pronunciamiento reflexivo

sobre la situación de virus Ebola en Chile y el

mundo.

La Academia considera que la situación de-

rivada de la epidemia actual por virus Ebola,

evidenciada a partir del 25 de Marzo 2014 a la

fecha, debe y deberá seguir siendo motivo de

preocupación para la comunidad internacional

toda, incluyendo la chilena, por varios motivos:

- Corresponde a una patología de gran facilidad

de diseminación y alta letalidad, de carácter

devastador, que causa esta infección en algu-

nas de las zonas más empobrecidas de África.

A pesar de conocerse la infección por este

virus desde el año 1976, los esfuerzos por

estudiarlo en mayor profundidad y avanzar en

posibles tratamientos así como estrategias de

control y prevención, sólo se han acelerado

con la reciente epidemia a la luz de su posible

extensión fuera de las zonas tradicionalmente

epidémica, de lo cual se ha sabido de casos

anecdóticos en España y Estados Unidos.

- La expansión de esta epidemia fuera de su lu-

gar de origen, si bien ha sido muy limitada, se

puede incrementar dado el importante aumento

de los viajes intercontinentales especialmente

por vía aérea. Esta movilidad creciente obliga

a todos los países, incluyendo Chile, a estar

adecuadamente informado y preparado para

afrontar en el presente y futuro ésta y otras

epidemias que puedan nacer en lugares apa-

rentemente remotos.

- La experiencia de países cercanos a la zona

epidémica demuestra que con medidas sani-

tarias estrictas, el brote puede ser apropiada-

mente controlado. Los resultados que muestra

Nigeria, declarada recientemente como país

libre de Ebola, son esclarecedores y muestran

al mundo que la comunión de esfuerzos puede

derrotar esta epidemia.

- Ante la inexistencia de medidas terapéuticas

o de inmunización demostradas, tanto en

seguridad y eficacia, surge la posibilidad de

aplicar antivirales, anticuerpos, plasma inmune

o vacunas como medidas de urgencia aunque

no hayan sido completamente estudiados. Si

bien lo anterior se ha considerado éticamen-

te justificado para una epidemia de tan alta

mortalidad y rápida expansión, el uso de estas

intervenciones constituye un desafío para com-

binar su uso compasivo y solidario, junto a una

investigación seria que genere conocimiento

útil para establecer tratamientos y vacunas

eficaces y seguros.

Sin perjuicio de lo anterior, es importante di-

mensionar adecuadamente la presente epidemia

a la luz del conocimiento médico actualmente

disponible, identificando las áreas aún inciertas

para mantener a la población adecuadamente

informada y adoptar medidas proporcionales al

riesgo existente. En relación a esto la Academia

considera que:

- El mecanismo de transmisión de virus Ebola

está bien estudiado, siendo este fundamental-

mente por contacto directo con una persona

enferma o fallecida y/o sus fluidos corporales,

sin evidencia objetiva de transmisión por vía

aérea. Si bien los estudios son pocos, existe

consenso en que a mayor severidad de la en-

fermedad, mayor riesgo de transmitir el virus.

Las personas en mayor riesgo de contagiarse

son aquellos con mayor tiempo de contacto

con personas gravemente enfermas, lo cual

incluye al personal de salud y a los cuidadores

familiares.

- La mínima o nula transmisión a partir de per-