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Contenido disponible en
www.neumologia-pediatrica.clrúrgico, la ecografía permite seleccionar al cirujano la vía de
abordaje de acuerdo con la localización del quiste, y le brinda
además referencias anatómicas de la lesión con las estructuras
intrahepáticas; esto es de utilidad en la cirugía de resección
(16)
.
Diagnóstico diferencial: cuando el quiste se halla en
pulmón debe diferenciarse entre el carcinoma pulmonar
primario o metastático, el absceso pulmonar y la tuberculosis.
En un segundo plano queda la sospecha de infecciones por
hongos, nocardias y otros procesos menos frecuentes
(17)
.
Cuando se localiza en hígado, debe diferenciarse entre
hemangioma, carcinoma metastático y absceso hepático
bacteriano o amebiano
(15)
.
DIAGNÓSTICOS DE LABORATORIO
a) Inmunoelectroforesis: se basa en una banda de precipita-
ción en la zona de las albúminas conocido como Arco 5,
descrito por Caprón. Su presencia confirma la enferme-
dad, pero su ausencia no la descarta. Su sensibilidad es de
94%.
b) Prueba de aglutinación: es útil para diagnósticos sero-
lógicos, es muy sencilla de realizar y está al alcance de
cualquier operador. Su sensibilidad es de 64%.
c) Hemaglutinación indirecta cuantitativa: es útil para com-
plementar las pruebas anteriores por su grado de especi-
ficidad. Se considera positiva a títulos de 1/320 o más. La
sensibilidad es del 94%.
d) La doble difusión Arco 5 (DD5): se la puede realizar en
laboratorios de bajos recursos. Tiene una sensibilidad
semejante a la inmunoelectroforesis.
e) ELISA: para detección de portadores no sintomáticos.
Útil en pacientes operados y/o en tratamiento con Alben-
dazol, la primer determinación debe realizarse antes de
la cirugía o de iniciarse el tratamiento. Es sensible en un
50-56% para los quistes pulmonares.
f) Intradermoreacción de Casoni: existen opiniones diver-
gentes sobre su valor.
g) Anticuerpos monoclonales.
h) Exámenes parasitológicos de líquidos orgánicos: en ca-
sos de quistes comunicados con el exterior. El examen
microscópico de material obtenido por eliminación es-
pontánea o a través de fístulas, rupturas a bronquios, etc.,
demuestra los embriones característicos
(9)
.
TRATAMIENTO
El tratamiento de la hidatidosis pulmonar es quirúrgico y
consiste en la erradicación de los quistes, la corrección de los
efectos de la presencia del quiste en el órgano (periquística
y cavidad residual) y tratar la complicaciones que el quiste a
provocado en su evolución (fístulas bronquiales y siembra
pleural). El tratamiento médico está reservado para quistes
múltiples, únicos univesiculares < 5 cm, pacientes de alto
riesgo quirúrgico o inoperables y como quimioprofilaxis pre
y postoperatoria. Los fármacos utilizados son los derivados
benzoimidazólicos y de ellos, el de elección es el albendazol
por tener mejor absorción, este impide la utilización de la
glucosa por parte del parásito y la duración del tratamiento
se recomiendan 3 a 6 ciclos de 4 a 6 sem y como quimio-
profilaxis 4 a 7 días antes de la cirugía y 1 a 3 ciclos en el
postoperatorio.
Las contraindicaciones del tratamiento quirúrgico: se dan
en los casos de quistes múltiples, quistes no viables, quistes
de difícil abordaje o localización no accesible, los quistes que
estén parcial o totalmente calcificados y los quistes de muy
pequeño tamaño. La estrategia de prevención consiste en
romper el ciclo biológico del parásito, con particular énfasis
en las zonas endémicas, lo que se logra desparasitando a los
perros y realizando practica de medidas higiénicas básicas:
agua potable, lavado correcto de verduras y evitar alimentar
a los perros con las vísceras de animales faenados
(18,19)
.
CONCLUSIONES
La hidatidosis pulmonar es una es una zoonosis de distribu-
ción mundial, con alta incidencia en países latinoamericanos
como: Argentina, Uruguay y Chile y europeos como Grecia,
Portugal y España, relacionados con deficientes condiciones
Figura 2.
TAC de tórax de escolar de 9 años de edad de hidatidosis
pulmonar. Apreciándose imágenes cavitadas con nivel hidroaéreo a nivel
del pulmón derecho.
A
B
C
Neumol Pediatr 2013; 8 (1): 5-9.
Hidatidosis pulmonar - J. Rodulfo et al