

72
Contenido disponible en
www.neumologia-pediatrica.clFigura 5.
Ecografías del mismo paciente evidenciando tabiques en
cavidad pleural.
indica la presencia de una fístula broncopleural, neumotórax
acompañante, presencia de bacterias formadoras de gas o
la ruptura del esófago
(47)
. Por lo anteriormente descrito, las
distintas guías recomiendan realizar radiografía de tórax en
pacientes:
• Que ameriten hospitalización (tienen neumonía grave).
• Con sospecha de complicaciones.
• Menores de 36 meses, con fiebre mayor de 39 °C y foco
oculto.
• Con evolución tórpida y/o evidencia de complicaciones.
No es necesario realizarla en pacientes con diagnóstico
de neumonía, según la OMS, es decir, sin tiraje
(1,4,20)
.
CONCLUSIONES
Una vez hecha la revisión de este capítulo, es claro que
el diagnóstico etiológico de la neumonía en los niños es difícil
y que en la práctica, un criterio aislado, sea clínico, epide-
miológico, de laboratorio o imagenológico, no es capaz de
diferenciar neumonía bacteriana de viral o atípica. Sólo la
combinación de varios de ellos, hacen la mejor aproximación;
por tanto, el médico clínico debe esmerarse en reunir varios
de estos criterios, de acuerdo a su disponibilidad y acceso,
para optimizar el diagnóstico y manejo del paciente.
REFERENCIAS
1. Bradley JS, Byington CL, Shah SS, et al. The management of
community-acquired pneumonia in infants and children older
than 3 months of age: clinical practice guidelines by the Pediatric
Infectious Diseases Society and the Infectious Diseases Society of
America. Clin Infect Dis 2011; 53: e25.
2. Reducción de la mortalidad en la niñez. Organización Mundial de la
Salud, centro de prensa. Nota descriptiva número 178, septiembre
2012.
3. Lozano JM. Epidemiología de las enfermedades repiratorias en la
niñez. Neumología Pediátrica. Infección, alergia y enfermedades
respiratorias en el niño. Reyes MA, Aristizábal G, Leal FJ. 5 Edición.
Editorial Médica Panamericana. Bogotá; 2006.
4. Agudelo B, Arango M, Cala LL, et al. Asociación Colombiana de
Neumología Pediátrica. Guía de práctica clínica en el tratamiento
del niño con neumonía adquirida en la comunidad 2010; 5: 7-102.
5. Navarro D, García-Maset L, Gimeno C, Escribano A, García-
de-Lomas J. Performance of the Binax NOW
Streptococcus
pneumoniae
urinary antigen assay for diagnosis of pneumonia in
children with underlying pulmonary diseases in the absence of
acute pneumococcal infection. J Clin Microbiol 2004; 42: 4853-5.
6. Lee PI, Chiu CH, Chen PY, Lee CY, Lin TY. Guidelines for de
management of comunity -acquired pneumoniae in children. Acta
Paedriatr Taiwan 20007; 48: 167-80.
7. Isaacs, D. Problems in determining the etiology of community-
acquired childhood pneumonia. Pediatr Infect Dis J 1989; 8:143-6.
8. Programme for the control of Acute Respiratory Infections.
Technical bases for the WHO recommendations on the
management of pneumonia in children at first-level health facilities.
Geneva: World Health Organization, 1991. WHO/ARI91.20.
9. Palafox M, Guiscafre H, Reyes H, et al. Diagnostic value of
tachypnoea in pneumonia defined radiologically. Arch Dis Child
2000; 82: 41e5.
10. Smyth A, Carty H, Hart CA. Clinical predictors of hipoxaemia in
children with pneumonia. Ann Trop Paediatr 1998; 18: 31-40.
11. Jadavji T, Law B, Lebel MH, Kennedy WA, et al. A. practical guide
for the diagnosis and treatment of pediatric pneumonia. CMAJ
1997; I56: S703-S711.
12. Shann F, Barrer J, Poore P. Clinical signs that predict death in
children with severe pneumonia. Pediatr Infect Dis J 1989, 8: 852-
5.
13. Spooner V, Barrer J, Tulloch J, et al. Clinical signs and risk factors
associated with pneumonia in children admitted to Goroka
Hosiptal, Papua, New Guinea. J Trop Pediatr 1989; 35: 295-300.
14. Zukin DD, Hofman JR, Cleveland RH, et al. Correlation of
pulmonary signs and symptoms with chest radiographs in the
pediatric age group. Ann Emerg Med 1986; 15: 792-6.
15. Ruvinsky R. Balanzt AM. Neumonías bacterianas y virales. En:
Infecciones respiratorias en niños. Washington DC. Organización
Panamericana de la Salud-Organización Mundial de la Salud 1997:
215-49.
16. Bachur R, Perry H, Harper MB. Occult pneumonias: empiric chest
radiographs in febrile children with leukocytosis. Ann Emerg Med
1199; 33: 166-73.
17. Padilla Ygreda JLPF, Rojas Galarza R, Tantaleán Da Fieno J, Suárez
Moreno V, Cabezas Sánchez C, et al. Perfil etiológico de la
neumonía adquirida en la comunidad en niños de 2 a 59 meses en
dos zonas ecológicamente distintas del Perú. Arch Argent Pediatr
2010; 108: 516-23.
18. Mc lntosh K. Community-Acquired Pneumonia in Children. N Engl
J Med 2002; 346: 429-37.
19. Moreno L, Krishnan J, Durán P. Ferrero F. Development and
validation of a clinical prediction rule to distinguish bacterial from
viral pneumonia in children. Pediatr Pulmonol 2006; 41: 331-7.
20. Harris M, Clarck J, Coote N, et al. British Thoracic Society
guidelines for the management of community acquired pneumonia
in children: update 2011. Tórax 2011; 66: ii1-ii23.
21. Peltola V, Mertsola J, Ruuskanen O. Comparison of total white
blood cell count and serum C-reactive protein levels in confirmed
bacterial and viral infections. J Pediatr 2006; 149: 721-4.
22. Tabain I, Ljubin-Sternak S, Cepin-Bogović J, et al. Adenovirus
Neumol Pediatr 2013; 8 (2): 66-73.
Diagnóstico de neumonía adquirida en la comunidad en la población infantil - Libia L.