Boletín HCSBA

. TEMA 1 . INFECCIONES POR MORDEDURAS DE ANIMALES. Dra. Romina Espinoza N. 1 , Dr. Luis Delpiano M. 2 1.- Becada de Pediatría. 2.- Pediatra Infectólogo, Hospital Clínico San Borja Arriarán. julio 2020. Volumen 19 - N ° 77 6 Introducción y epidemiología Las mordeduras de humanos y animales constituyen un problema frecuente, son causa de consulta habitual en atención primaria y urgencias pediátricas, independiente del estrato socio económico. Este tipo de lesiones es más frecuente en los dueños de animales, siendo ocasionada por las propias mascotas más que por perros vagabundos, y afecta a niños más que adultos ( 26 versus 12 %). Las consecuencias de las mordeduras para la salud humana dependen de distintos factores, relacionados con el animal mordedor (especie, raza, tamaño y estado de salud) y con la persona mordida (edad, estatura, comorbilidades y acceso para atención médica). En perros se ha descrito que ciertas razas registran mayor cantidad de ataques, destacando el pastor alemán, bullterriers, blue/red heelers, dobermans y rottweilers. Los niños tienen más probabilidades de sufrir lesiones por mordedura de perro en comparación con los adultos, y están más expuestos entre los 5 y 9 años. El sitio más común de lesión es la cara y rara vez resultan en fracturas. Para las lesiones faciales, el área más afectada es el tercio medio del rostro ( 55 %), esto se atribuye a la estatura que presentan los niños, el tamaño desproporcionado de la cabeza en relación con el cuerpo, la disposición que tienen para acercar sus caras al animal y las habilidades motoras limitadas para poder defenderse. En Estados Unidos se estima que anualmente se producen 250.000 mordeduras humanas, 400.000 mordeduras de gatos y 4.5 millones de mordeduras de perros independiente de la edad. Sólo el 10 % ocurren en la cara, dos tercios de esas heridas ocurren en menores de 10 años. Otro estudio estadounidense que incluyó a 1616 pacientes pediátricos, el 91.3 % fue mordido sólo en un área anatómica y las lesiones de cabeza y cuello fueron las más prevalentes ( 56.5 %). En Chile entre los años 2003 y 2012 , se reportaron 327.150 personas mordidas por animales, con una tasa de 196 / 100.000 habitantes, correspondiendo al 90 % mordidas por perro. En nuestro país existe una normativa sanitaria para prevención y control de enfermedades específicas de mordeduras como tétanos y rabia; el Reglamento de Prevención y Control de Rabia en el hombre y los animales DS N° 1 del 2013 y la norma técnica de vacunación antirrábica en humanos, los cuales indican el procedimiento a seguir en caso de personas mordidas. Se debe realizar la notificación del caso a la Autoridad Sanitaria para completar la vigilancia de rabia “Denuncia de accidentes por mordeduras”. Microbiología en infecciones por mordedura animal Entre el 5-60 % de todas las mordeduras se complican con una infección, de éstas, el 50 % fue producida por gatos, el 5-16 % por perros y el 2,5 % por roedores. La mayoría de las infecciones tienen

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